Los alimentos con calorías negativas, además de bajos en estas, suelen ser ricos en fibra, por lo que nuestro cuerpo tarda más en digerirlos, retrasando la aparición del hambre. Tienen abundantes vitaminas y minerales y contienen antioxidantes. Realmente, este grupo está formado en su mayor parte por frutas y verduras.
Uno de los más famosos de esta lista es el apio, que apenas cuenta con 16 calorías por cada 100 gramos. Contiene fibra, vitamina A y C, ácido fólico, es diurético y un antiinflamatorio natural. También encontramos la lechuga, con solo 15 calorías. Gracias a su gran contenido en fibra resulta muy saciante.
El pepino es otra de las verduras que puede considerarse de calorías negativas, solo aporta 16 por cada 100 gramos. Es muy hidratante y tiene muchas vitaminas y minerales. Otras verduras que también forman parte de esta lista son los tomates, los pimientos, las cebollas o los espárragos.
Entre las frutas destacan los cítricos, sobre todo la naranja y el limón, que además ayudan a activar el metabolismo y son ricos en vitamina C. El melón y la sandía tienen una gran cantidad de agua y en torno a 30 calorías por cada 100 gramos. También podemos contar con la piña o la pera.
Como ves, estos alimentos pueden ser unos buenos aliados como parte de tu dieta equilibrada, te ayudan a sentirte saciada y consumen más calorías de las que aportan, pero no debemos basar nuestra alimentación en ellos en exclusiva porque estaríamos perdiendo muchos nutrientes que nuestro cuerpo necesita.